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Histórico. Guido Pozzan se le animará al Aconcagua. Un sueño que está cada vez más cerca

Guillermo Ibarra

Y sí. Son las notas como siempre digo, del estilo de nuestra revista. Sobre estas cosas, sí que da gusto escribir. Ya les hemos contado sobre las expediciones de Guido Pozzan al Cerro San Bernardo y al Cerro Nevado y obviamente no fue lo único que hizo, aunque fueron movidas importantes.

Guido es un muchacho de un perfil muy bajo, muy educado e hijo de una conocida familia navarrera, que imaginamos, hoy estará tan orgullosa como expectante. ¿El motivo? Guido intentará llegar a lo más alto del Aconcagua, en diciembre de este año. Sería el primer navarrero que lo logre y se está preparando para eso. Serán 15 días de expedición, que requieren de una preparación y acondicionamiento previos, más que importante.

Ayer y hoy, estuvimos charlando con él y resaltamos algunos conceptos que queremos compartir con todos ustedes:

«La montaña es la última que tiene la palabra» y «Es un desafío muy personal; es un sueño», fueron algunos de ellos, sólo a modo de ejemplo.

«El año pasado me quedé con las ganas…no es fácil desde lo físico, lo mental y menos desde lo económico» sostuvo Guido, por lo que intentará hacer la expedición sólo, sin tener que afrontar los gastos que le demande cualquier empresa.

¿Cómo se prepara? Ayer por ejemplo, subió a un cerro de más de 4000 metros y durmió en su carpa a más de 15 grados bajo cero. Sale a correr permanentemente y se pone a punto a diario para lograr llegar a lo más alto del referente indiscutido de la Cordillera de los Andes, el Cerro Aconcagua. El cerro tiene dos picos que ofician de cumbre: el denominado Norte, con 6.962 metros sobre el nivel del mar y el Sur, de 6.930 metros sobre el nivel del mar. Para ascender, se acercan visitantes de todo nuestro planeta. Sus características la hacen la montaña más elevada del mundo fuera del sistema que forman los Himalayas asiáticos.

Para que tengan una real dimensión de lo que Guido intentará hacer, basta con resaltar que la dificultad más grande pasa por las bajísimas temperaturas y la altura sobre el nivel del mar. Eso la hace una montaña bien difícil. El frío a las 3 o 4 a.m. es verdaderamente extremo.

En poco tiempo, si todo va como está previsto, un corazón navarrero dirá presente allí y hará historia. Mucha fuerza de parte nuestra, estaremos apoyando con todo nuestro corazón. Muy pronto seguramente, otros tomarán nota de esto y lo replicarán y eso será muy bueno esta vez. Queremos que todo el mundo se prenda a esta movida, ya que allí, bien bien alto, muy cerquita del cielo, nuestro querido pueblo estará representado y de la mejor manera.

Guillermo Ibarra.

 

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