Confesiones en pandemia. Hoy, Kelo Salinas

Segunda edición de esta nueva sección denominada «Confesiones en pandemia». En esta oportunidad, responde Kelo Salinas. Preparate, podés ser el próximo.

E.N. ¿Quién es Kelo Salinas? 

Es una persona que tiene más defectos que virtudes, pero siempre quiso ( tal vez lo logró) ser una buena gente.

E.N. ¿Qué ves cuando te mirás al espejo? 

Alguien agradecido a la vida. Le digo: vivamos este día de la mejor manera.

E.N. ¿Considerás que esta pandemia sirvió para que aprendiéramos algo o cambiáramos, tal como de aseguraba en un principio? 

Está pandemia nos puso a prueba en la convivencia diaria, muchos se tuvieron que reinventar para seguir subsistiendo, quizás sirvió para que haya más empatía entre los seres humanos, algunos siguieron su vida cotidiana como era.

E.N. Un recuerdo de la infancia. 

Ir a la escuela a caballo 10 kms. de ida e igual la vuelta, el partido a la bolita con mi papá antes de ir. Las visitas a los parientes en sulky.

E.N. Zapiola….

Un lugar donde pasé parte de mi vida, un pueblo para no olvidar, los amigos, la secundaria, todos éramos como familia, los años en el almacén de mi prima. Hasta antes de la pandemia realizábamos un encuentro anual entre los que nos fuimos de allá.

E.N. ¿Alguien a quien consideres un maestro en tu vida? y los motivos… 

A mi padre; un día me dijo: tratá de no quedarte en el campo, esto me llevó por otros caminos y acá estamos.

E.N. Una situación insólita que te haya tocado vivir. 

Estaba cargando gas en Lobos ( hace 15 años más o menos), en otro surtidor escucho una voz conocida. Tenía un timbre de voz muy grave, era mi profesor de  educación física de la secundaria, lo saludo y me dice: ¿Que hacés Salinas?,  le pregunto, ¿Te acordás de mi ( habían pasado 30 años, yo tenía 18 años cuando iba al colegio y ahora 48, hubo un cambio grande) con todos los alumnos que has tenido?  Y me dijo, «los primeros no se olvidan«.

E.N. Hablanos de tu adolescencia. 

Viví en Zapiola con mi abuela desde los 13 para poder estudiar, la casa estaba frente a la estación y al colegio en Empalme Lobos, fue un gran cambio pasar de la escuela primaria al secundario y en una ciudad, fueron años maravillosos, hacer amigos nuevos, empezar con los cumple de 15, jugar al fútbol.

E.N. ¿Alguna manía, obsesión o t.o.c.? 

Obsesión: la puntualidad.

E.N. Contanos sobre tu familia y sobre cómo transcurre tu  vida hoy. 

Esta compuesta por mi esposa, tres hijos y dos nietos. Acá tengo que hacer un agradecimiento a mi esposa que siempre me apoyó, fue mi sostén ante alguna adversidad. Mis hijos son muy unidos y familieros y mi madre, que también aporta su granito de arena.

E.N. ¿Hincha o simpatizante de algún club de fútbol? 

Boca Juniors.

E.N. Tu comida favorita. 

Guiso de mondongo, lo cambio por cualquier comida.

E.N. ¿Creés en Dios? 

Sí, no voy a misa, pero cuando estoy de vacaciones visito capillas, parroquias que se encuentren dónde estoy; si son antiguas mejor.

E.N. Los amigos… 

Que palabra difícil. Hay que sostenerlos en el tiempo, pero los tengo, son pocos, son los que siempre están de alguna manera.

E.N. La política.. 

Es maravillosa, el problema son los políticos ( hay excepciones). Siempre me hago está pregunta: cómo pudimos caer del 6to. lugar que ocupábamos en la década del 40, al lugar que estamos hoy?

E.N. ¿Un libro para recomendar? 

Ninguno en particular.

E.N. Una película… 

Sueños en fuga.

E.N. Navarro…. 

La ciudad que e adoptó, me dió la familia, los nuevos amigos y la que me da la posibilidad de seguir trabajando.

E.N. ¿Si pudieras elegir un lugar de nuestro país para vacacionar, cuál sería y por qué?

He tenido la suerte de conocer bastante mi país, pero el lugar a elegir es San Martín de los Andes. Siempre agradezco haber recorrido bastante mi Argentina, pero éste lugar es mágico.

E.N. Si te permitiesen cinco minutos para compartir con alguien que ya no está, ¿Con quién serían y por qué?

Con mi padre; pasó el tiempo y nunca le agradecí lo que hicieron junto a mi madre por mí, y un día cuando menos lo esperaba, se fue.

E.N. ¿Qué le aconsejaría el Kelo de ahora, al Kelo de los 80/90?

Que siga por ese camino que es el correcto, va a encontrar piedras, pozos, etc. pero a pesar de todo, va por buen puerto.

E.N. Un anhelo… 

Que pase la pandemia, que podamos estar todos juntos y seguir la vida con normalidad, que el mundo pueda mejorar a través de los que lo habitamos.

E.N. Un mensaje final para los más jóvenes de nuestro pueblo.