Salud. El trastorno bipolar
24/05/2022
Guillermo Ibarra

Una persona puede sentirse, de manera intermitente, acelerada, llena de energía, hiperactiva, a veces irritable o agresiva, capaz de encarar cualquier tarea, con alta autoestima y sin necesitar de descansar a pesar de dormir muy pocas horas. Esta sensación los especialistas la llaman manía.
En otras ocasiones puede, por el contrario, sentirse cansado, incompetente, con poca energía, triste, desganado, con menor concentración y apetito y sin voluntad de hacer nada. Esto se llama depresión.
Cuando estas oscilaciones del ánimo se alternan con frecuencia, conforman el trastorno bipolar. En una versión menor se llama ciclotimia.
El trastorno bipolar puede afectar seriamente tanto la vida de quien lo padece como la de los miembros de su familia, con repercusiones sociales, laborales y/o en el rendimiento escolar. Es una de las principales causas de disfunción en estas áreas y, además, con tendencia al suicidio. Generalmente, quien padece esta inestabilidad emocional está en crisis o peleado con sus familiares.
Los enfermos bipolares corren el riesgo de hacer un peligroso manejo de la economía personal, ya que son capaces de involucrarse en “fabulosos” negocios o inversiones, que con frecuencia terminan en espectaculares fracasos.
Con frecuencia, las personas pueden padecerlo por años antes de que sea detectado correctamente.
En la actualidad, las nuevas técnicas de investigación que analizan el cerebro permiten un mejor diagnóstico y tratamiento. Existe un componente genético reconocido dentro de las causas del trastorno bipolar, ya que múltiples estudios familiares han mostrado su mayor prevalencia en familiares de pacientes afectados por él, en comparación con personas provenientes de familias sanas.
Para mayor rapidez en la detección y tratamiento de este desorden, los psiquiatras prestan atención a alteraciones cerebrales subyacentes con zonas profundas del mismo (como la amígdala y el hipocampo) y en la parte frontal del cerebro, donde se procesan las emociones. El trastorno bipolar puede afectar seriamente tanto la vida de quien lo padece como la de los miembros de su familia, con repercusiones sociales, laborales y/o en el rendimiento escolar.
En pocas palabras, los estudios demuestran la existencia de una base anatómica y química del trastorno bipolar, lo cual habilita un mejor tratamiento.
Por último, vale subrayar que estos altibajos anímicos cursan en paralelo con otras enfermedades a la cual son propensos los pacientes: cardíacas, diabetes, ACV, obesidad mórbida o cáncer.
Aunque es un trastorno muy frecuente casi la mitad de los pacientes no están bien diagnosticados, desconocen que lo padecen y suelen recibir tratamientos equivocados, además de no reconocer nunca que lo padecen.