El Navarrero cumple hoy tres años

Un cumpleaños distinto, sin festejos. De todos modos, a la hora del balance, llega el momento de la tranquilidad. Como en la vida misma, lo importante es dejar todo y así lo hice. Son ya tres años de crecimiento continuo y a pesar de la incertidumbre con respecto a lo que vendrá, se sigue intentando.

Hace muy poco, fue necesario un golpe de timón y El Navarrero, pasó a ser revista digital, dejando atrás al diario. Más que acertada la decisión, en la que se dejó de publicar política, policiales y pedidos de publicación referentes a temas delicados o de interés público. Así fue, que no sólo creció la audiencia aún más, sino que recobraron fuerzas, el arte, la música, la cocina y lo social, sin olvidarnos de lo deportivo, donde nos movíamos como pez en el agua.

Hoy, es momento de agradecer, como siempre. En primer lugar a Dios, en segundo lugar a mi familia, a los lectores, y luego y muy especialmente, a los sponsors, que durante el mes pasado respondieron de manera increíble a pesar de la situación. Pero dejé para el final, a los amigos, el sostén fundamental en esta durísima etapa. Cada uno de ellos sabe del aprecio que les tengo y no me sorprendió en lo más mínimo la respuesta que recibí.

Dicen que no saldremos iguales de todo esto, yo creo que tampoco, aunque tengo fe, de que será muy pronto. No hay mal que dure 100 años ni cuerpo que lo resista dice el refrán. Estoy mucho más de acuerdo con la segunda parte, necesitamos volver a la normalidad cuanto antes y que la rueda vuelva a girar. Países que han sufrido mucho más que nosotros van en ese camino, mientras tanto, desde mi lugar, se hace lo que se puede, sin olvidarme de que detrás del trabajo hay una familia por la cual velar y que necesito ver entera. No puedo darme algunos lujos, todos saben de que manera trabajo. No dependo de nadie. Sería muy lindo, desde la tranquilidad de mi casa, programar entrevistas todo el día, pero eso no es posible. Por eso siempre hablo del esfuerzo genuino.

Tres años, mil anécdotas, fines de semana interminables y de mucha felicidad. Ahora es tiempo de replanteos y de soñar con que cada anuncio de prolongación de la cuarentena sea el último. Mientras tanto, como siempre, sigo intentando dar lo mejor y me sigue emocionando la respuesta que recibo.

Parafraseando al gran Gustavo Cerati….“No sólo no hubiéramos sido nada sin ustedes, sino con toda la gente que estuvo a nuestro alrededor desde el comienzo; algunos siguen hasta hoy. ¡Gracias….. totales!”